
Un terremoto de magnitud 6,0 en el este de Afganistán ha causado más de 800 muertes y miles de heridos, con un balance que se espera aumente. Las labores de rescate se ven dificultadas por el terreno montañoso y la frágil infraestructura, en una nación ya golpeada por crisis humanitarias y conflictos prolongados.