
La nueva reforma tributaria del Gobierno Petro enfrenta un panorama adverso en el Congreso, con una fuerte oposición de gremios y partidos políticos que la consideran perjudicial para la economía y la clase media. La propuesta busca un recaudo histórico para financiar el presupuesto, pero es criticada por no abordar la eficiencia del gasto público, lo que augura una difícil batalla legislativa.