
El alto el fuego en Gaza ha iniciado un complejo intercambio de rehenes y prisioneros, pero enfrenta enormes desafíos humanitarios, como una reconstrucción multimillonaria y una hambruna declarada.
La tregua es precaria, con violaciones esporádicas y disputas sobre el cumplimiento de los acuerdos, manteniendo la tensión en la región mientras la comunidad internacional, incluida Colombia, busca formas de contribuir a la paz y la recuperación.











