
La crisis de la Nueva EPS se ha intensificado, según la Contraloría, con deudas que superan los $21 billones y graves fallas administrativas. Mientras el Gobierno del presidente Petro denuncia corrupción y el ocultamiento de pasivos de administraciones anteriores, el informe del ente de control fiscal sugiere que el deterioro se ha profundizado durante la intervención. La situación pone en riesgo la sostenibilidad del sistema de salud y la atención de millones de colombianos, generando un debate nacional sobre las responsabilidades y el futuro del aseguramiento en el país.










