
Telefónica está ejecutando una retirada sistemática de Hispanoamérica para reducir su deuda y enfocarse en sus mercados principales.
Las ventas de sus operaciones en Uruguay y Ecuador a Millicom son pasos clave en esta estrategia que, aunque genera pérdidas contables a corto plazo, busca mejorar la sostenibilidad financiera y el enfoque estratégico del grupo a largo plazo.








