
BBVA avanza con su OPA hostil mejorada sobre Banco Sabadell, a pesar del firme rechazo del consejo de este último por considerarla insuficiente. Con la aprobación regulatoria de la CNMV y un plazo final fijado para el 10 de octubre, la decisión recae ahora en los accionistas, en un entorno de intensa presión y sin perspectivas de una nueva oferta por parte de BBVA.