
El plan de paz de Estados Unidos para Ucrania, que exige importantes concesiones territoriales y militares por parte de Kiev, ha sido rechazado por el presidente Zelenski pero visto como un posible punto de partida por Rusia. El ultimátum emitido por Trump ha creado una crisis diplomática, llevando a los aliados europeos a reafirmar su apoyo a la soberanía de Ucrania y generando dudas sobre el futuro de la ayuda occidental.










