Israel niega hambruna en Gaza y rechaza el informe de la ONU

El sistema de Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases (IPC) de la ONU confirmó el 22 de agosto el estado de hambruna en la Gobernación de Gaza y la Ciudad de Gaza, una situación inédita en Oriente Medio. Según los informes, más de 500.000 personas enfrentan condiciones "catastróficas" de hambre, indigencia y muerte tras 22 meses de conflicto. La ONU advirtió que se espera que la hambruna se extienda a las gobernaciones de Deir Al-Balah y Khan Younis para finales de septiembre de 2025. La ONU y diversas organizaciones no gubernamentales han calificado la hambruna como "causada por el hombre" y una "consecuencia directa de políticas del Gobierno israelí". Los informes señalan que una "obstrucción sistemática" y el bloqueo de suministros y bienes esenciales son los factores principales de la crisis. El jefe de derechos humanos de la ONU afirmó que las muertes derivadas de esta situación podrían constituir un "crimen de guerra por asesinato intencionado". El gobierno de Israel ha negado rotundamente la existencia de hambruna en el enclave palestino y rechazó con dureza el informe de la ONU.

Las autoridades israelíes lo calificaron como "fabricado a medida" para favorecer a Hamás y acusaron que se basa en información manipulada.

Mientras tanto, la crisis humanitaria se agrava. Un informe mencionó la muerte de ocho personas por inanición, entre ellas dos bebés, elevando la cifra de víctimas directas de la hambruna a 281. Adicionalmente, se reportó un ataque del ejército israelí sobre una escuela en Gaza City que albergaba a desplazados, causando más de 30 víctimas.