Bogotá en Jaque: Cómo un Camión Partido en Dos Reveló la Vulnerabilidad de la Movilidad y la Seguridad

Un tractocamión que transportaba 32 toneladas de explosivos para Indumil se partió en dos en la Autopista Norte, desatando un caos vehicular sin precedentes y activando un complejo operativo de seguridad que paralizó uno de los principales accesos a Bogotá durante horas.

Un grave incidente vehicular paralizó el norte de Bogotá en la madrugada del miércoles 3 de diciembre de 2025, cuando un tractocamión perteneciente a una caravana de seis vehículos que transportaba insumos para la empresa estatal Indumil se partió en dos. El suceso ocurrió en la Autopista Norte a la altura de la calle 233, en sentido Chía-Bogotá, frente al centro comercial Bima, debido a una aparente falla estructural en el chasis del vehículo. La situación generó una alerta mayor, ya que el camión averiado transportaba 32 toneladas de ANFO, un explosivo de uso industrial. Inmediatamente, se activaron los protocolos de emergencia y se desplegó un fuerte operativo de seguridad que incluyó la presencia del Ejército Nacional y la Policía Militar. A pesar de la naturaleza del material, Indumil aseguró que no existía peligro para la comunidad, pues la carga era transportada bajo estrictas medidas de seguridad.

Las labores se centraron en el traspaso seguro del material a otro vehículo, un proceso que se extendió por varias horas.

El impacto en la movilidad fue masivo, generando una congestión vehicular que afectó a miles de ciudadanos que ingresaban a la capital desde los municipios del norte de la Sabana. La detención de toda la caravana sobre la vía prolongó el trancón. La Secretaría de Movilidad recomendó tomar vías alternas como la carrera Séptima, que también registró un alto flujo vehicular. La situación se complicó aún más por la presencia de otro camión varado en la calle 146.

El caos afectó gravemente al sistema de transporte público.

Rutas zonales y alimentadoras del Portal del Norte, como la B401, B902, B924, T11 y T163, sufrieron alteraciones y retrasos significativos.

Este evento puso de manifiesto la vulnerabilidad de las principales vías de acceso a Bogotá y los riesgos asociados al transporte de materiales peligrosos en zonas urbanas, evidenciando cómo un solo incidente puede colapsar la movilidad y generar considerables pérdidas económicas.