Bogotá, epicentro de la música y la cultura afrocolombiana: entre legados, hitos y nuevos diálogos



Bogotá fue el escenario de la primera edición del evento "Musicians on Musicians" de ROLLING STONE en Español, un punto de encuentro entre diversas generaciones y estilos musicales. Realizado en el Cumbia House de Carlos Vives, la jornada incluyó enriquecedoras conversaciones entre artistas como Santiago Cruz y Junior Zamora, y Adriana Lucía con Kei Linch, quienes dialogaron sobre sus inicios, inspiraciones y la importancia de sus raíces. La celebración continuó con presentaciones de Duplat, Andrés Cepeda, Kapo y Eladio Carrión, mostrando la diversidad de la industria musical latina y sirviendo como puente entre distintos géneros. Paralelamente, la capital colombiana fue testigo de importantes hitos para la cultura afrocolombiana. La agrupación Kuisitambó marcó un precedente al ser el primer grupo de música afrocolombiana en presentarse en el Movistar Arena, abriendo el concierto de HEREDERO.
Con 21 años de trayectoria fusionando ritmos ancestrales y electrónica, este logro representa un avance significativo para la visibilidad del género. En esta misma línea, la Cinemateca de Bogotá organiza la décima edición de la "Toma Afro" del 19 al 30 de noviembre, un espacio para visibilizar prácticas artísticas y culturales afro a través del cine, la música y las artes escénicas. La iniciativa se complementa con el Laboratorio BECMA, enfocado en el cine afro y la creación editorial. En medio de esta vibrante actividad cultural, también se recordó el legado de figuras fundamentales de la música nacional. Falleció en Bogotá, a los 89 años, Plinio Córdoba, considerado el primer gran maestro de la batería de jazz en Colombia y un referente de la música afrocolombiana. Su partida deja un vacío en la escena musical, pero su influencia perdura como parte esencial de la historia sonora del país.











