Avance clave en caso de Jaime Moreno: Se entrega en Cartagena el segundo implicado en la fatal golpiza

Ricardo González, señalado como el segundo agresor en el crimen del estudiante de la Universidad de los Andes, Jaime Esteban Moreno, se entregó voluntariamente a las autoridades en Cartagena, marcando un paso decisivo en una investigación que ha conmocionado a Colombia.

Ricardo González, identificado como el segundo presunto responsable de la muerte del estudiante Jaime Esteban Moreno, se entregó a la Fiscalía en la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de Canapote, en Cartagena, en la mañana del lunes 10 de noviembre. González se presentó acompañado de su abogada, Gladys Marcela López, quien aseguró que su cliente nunca tuvo la intención de salir del país ni de huir a Venezuela, como se había especulado. El crimen ocurrió en la madrugada del 31 de octubre en las afueras de la discoteca Before, ubicada en la calle 64 con carrera 15, en el norte de Bogotá. Tras una riña después de una fiesta de Halloween, Moreno fue brutalmente golpeado. La Fiscalía ha utilizado videos de cámaras de seguridad como prueba clave, en los cuales se observa a González presuntamente propinándole una patada a la víctima.

Las graves heridas causaron el fallecimiento del joven estudiante, un hecho que ha generado gran indignación a nivel nacional.

Con la entrega de González, ya son dos los implicados bajo custodia de las autoridades.

El primer detenido, Juan Carlos Suárez Ortiz, ya fue judicializado, aunque no aceptó los cargos que se le imputan.

Además, dos mujeres que habrían presenciado la agresión continúan vinculadas a la investigación.

Testigos habían reportado haber visto a González en su puesto de comidas rápidas en el centro de Bogotá un día después del ataque, antes de que desapareciera. Tras su entrega, se activó una orden de captura que pesaba en su contra y se espera que en las próximas horas sea trasladado a Bogotá para ser presentado ante un juez de control de garantías, donde se legalizará su captura y se le imputarán los cargos correspondientes.

Este avance es considerado fundamental para el esclarecimiento total del crimen.