Bogotá Atrapada: Entre Obras, Imprudencias y Fallas, la Crisis de Movilidad No Da Tregua

La movilidad en Bogotá enfrenta una crisis multifactorial, donde las megaobras de infraestructura como el Metro, las imprudencias sistemáticas de los conductores y fallas puntuales en la señalización se combinan para generar un panorama de caos y congestión diaria en la capital.

La movilidad en Bogotá se encuentra en un estado crítico debido a la convergencia de varios factores que afectan el día a día de sus habitantes. Por un lado, el avance de obras de gran envergadura como la Primera Línea del Metro, aunque representa un progreso a largo plazo, genera importantes traumatismos en el presente. Un ejemplo clave son los trabajos en la intersección de la avenida Caracas con calle 72, que a partir del 16 de diciembre obligan a implementar complejos desvíos vehiculares para continuar con la construcción del viaducto. A noviembre de 2025, el proyecto general del Metro reporta un avance del 67,17% y se espera que beneficie a 2,9 millones de personas a partir de marzo de 2028. Paralelamente a las dificultades por las obras, la ciudad padece de una cultura vial deficiente que agrava la congestión y eleva el riesgo de accidentes. Los malos hábitos de conducción, como el exceso de velocidad, el irrespeto a los semáforos, el uso del celular al volante y las maniobras peligrosas por parte de motociclistas, se han normalizado en las vías. Expertos señalan que, más allá de las sanciones, se requiere un cambio cultural profundo basado en la educación y la empatía para mitigar esta problemática que deteriora la calidad de vida y aumenta la percepción de inseguridad.

Esta compleja situación se ve exacerbada por fallas operativas y eventos imprevistos.

En el suroccidente de la ciudad, en la localidad de Kennedy, un semáforo en la intersección de la carrera 78 con calle 26 lleva cerca de un mes fuera de servicio, provocando congestiones y conflictos constantes entre conductores. Asimismo, la vía a La Calera ha experimentado un colapso en ambos sentidos debido a trabajos de mantenimiento de la empresa Enel Colombia cerca de la calle 85, lo que ha generado represamientos y demoras superiores a 40 minutos. Estos incidentes demuestran cómo problemas puntuales pueden paralizar corredores viales clave, sumándose al desafío estructural y de comportamiento que enfrenta la capital.