El futuro automotor en 2025: entre la nostalgia de la combustión y la innovación eléctrica



A pesar del auge de la movilidad eléctrica, varias marcas icónicas de automóviles deportivos apuestan por mantener viva la llama de los motores de combustión para 2025. Esta tendencia se materializa en lanzamientos de alto rendimiento que prometen una experiencia de conducción tradicional.
Entre los más esperados se encuentra la tercera generación del Aston Martin Vanquish, con un motor V12 biturbo que supera los 800 CV. A este se suman el Chevrolet Corvette ZR1 C8, equipado con un V8 biturbo que puede alcanzar los 1.064 CV, y el Ford Mustang GTD, una versión de súper alto rendimiento con un V8 de 815 CV. Porsche también contribuirá con una actualización de su 911 GT3, enfocada en mejoras aerodinámicas y reducción de peso. En un punto intermedio se sitúa Ferrari con su modelo F80, un superdeportivo híbrido de producción limitada a 799 unidades.
Este vehículo combina un motor V6 biturbo con tres motores eléctricos para entregar una potencia total de 1.184 CV, demostrando cómo la hibridación puede llevar el rendimiento a nuevos extremos sin abandonar por completo la combustión.
Paralelamente, el sector de los vehículos 100% eléctricos continúa su expansión.
Un ejemplo es la presentación del nuevo Zeekr X7 en el Salón del Automóvil de Bogotá. Este modelo se centra en ofrecer tecnología de vanguardia, con promesas de alta velocidad de carga y sistemas avanzados de protección a bordo. Este lanzamiento, junto con el interés de los expertos en el futuro de las baterías para vehículos eléctricos, subraya que la innovación en este campo sigue siendo una prioridad para la industria. De esta forma, 2025 se configura como un año donde la potencia clásica y la tecnología del futuro coexistirán en el mercado.










