Los Correos de Epstein: La Sombra del Escándalo que Vuelve a Acechar a Trump

La filtración de correos electrónicos del fallecido delincuente sexual Jeffrey Epstein ha reavivado una intensa controversia política en Estados Unidos, sugiriendo que el presidente Donald Trump tenía conocimiento de sus actividades ilícitas y desatando un cruce de acusaciones entre demócratas y republicanos.

La controversia se inició cuando congresistas del Partido Demócrata, miembros del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes, revelaron tres correos electrónicos de Jeffrey Epstein.

En estos mensajes, dirigidos a su colaboradora Ghislaine Maxwell —condenada por tráfico sexual— y al autor Michael Wolff entre 2011 y 2019, el magnate financiero aseguraba que Donald Trump “sabía de las chicas”. Uno de los correos, fechado en enero de 2019, es explícito: “Por supuesto que [Trump] sabía acerca de las chicas, ya que le pidió a Ghislaine que parara”. Otro mensaje alude a una presunta víctima que pasó horas en casa de Epstein con Trump. En respuesta, los republicanos publicaron más de 20.000 documentos del patrimonio de Epstein, acusando a sus oponentes de filtrar información selectivamente para crear una narrativa falsa.

Los documentos también revelan que, tras su distanciamiento, Epstein afirmó que podría “acabar con él” y que se presentaba como un intermediario entre Trump y Bill Gates.

La amistad entre ambos hombres se extendió hasta mediados de la década de 2000, pero Trump no ha sido acusado formalmente de ningún delito relacionado con el caso.

La Casa Blanca ha negado rotundamente las acusaciones.

La portavoz Karoline Leavitt calificó las filtraciones como una “manipulación política”, asegurando que los correos “no prueban nada”.

La defensa oficial sostiene que Trump expulsó a Epstein de su club Mar-a-Lago hace décadas por acosar a empleadas, incluida Virginia Giuffre, quien denunció a Epstein y falleció en abril de 2025. El propio Trump, a través de su red social Truth Social, acusó a los demócratas de revivir el “engaño de Jeffrey Epstein” para desviar la atención. El caso sigue generando debate, alimentado por teorías conspirativas dentro del movimiento MAGA, especialmente después de que el Departamento de Justicia confirmara en julio de 2025 que no existe una “lista de clientes” de Epstein y reiterara que su muerte en prisión en 2019 fue un suicidio. Mientras algunos líderes conservadores han expresado su decepción con las declaraciones de Trump, los demócratas continúan presionando para desclasificar todos los archivos del caso.