Doble Tormenta para Miguel Ángel del Río: Investigación Disciplinaria y Denuncias de Maltrato Sacuden al Abogado

El abogado Miguel Ángel del Río enfrenta un complejo panorama legal y personal, marcado por la apertura de una investigación disciplinaria en su contra por presunta manipulación de testigos y por graves señalamientos de violencia física y psicológica por parte de su expareja.

La Comisión de Disciplina Judicial de Bogotá ha iniciado una investigación formal contra Miguel Ángel del Río a raíz de una denuncia presentada por Beatriz Niño Endara, víctima en un proceso penal por violencia contra el exembajador Daniel Garcés Carabalí, a quien Del Río defendía. La queja sostiene que el abogado habría incurrido en un conflicto de intereses al representar simultáneamente a su cliente y a testigos clave en el caso, como las empleadas domésticas Claudia Arminta Bermúdez y Carmen Nexy Uriza. Según la denuncia, Garcés Carabalí habría pagado los honorarios de la defensa de una de las testigos, lo que sugiere un plan para influir en sus declaraciones. Como resultado, Del Río ha sido citado a una audiencia el 2 de febrero de 2026. Paralelamente, su expareja y socia, Ximena López Bustamante, ha hecho públicas serias acusaciones de maltrato durante sus ocho años de relación.

En diversas entrevistas, Bustamante relató episodios de violencia física, incluyendo un incidente en el que Del Río la habría golpeado en la cara para luego pedir perdón.

Además, lo acusa de manipulación emocional, violencia económica, desprestigio profesional y de aislarla.

Bustamante también denunció a la actual esposa de Del Río, Railin Yépez, por presuntas amenazas. López Bustamante desmintió categóricamente la versión de Del Río, quien afirma que ella le exigió 5.000 millones de pesos para no divulgar información comprometedora.

Calificó al abogado como una persona "narcisista" que distorsiona la realidad y basa sus defensas en estrategias mediáticas. Afirmó haber sido fundamental en la construcción de la carrera de Del Río y sugirió que él intenta desviar la atención hacia un conflicto sentimental para ocultar presuntas irregularidades financieras que, según sus abogados, podrían ascender a 14.000 millones de pesos. También mencionó reuniones de Del Río con Manuel Castañeda, conocido como el ‘narcochofer’, donde supuestamente se realizaban movimientos de dinero.