Crisis del bitcóin y auge de Ethereum: el mercado cripto se redefine en medio de la incertidumbre



El mercado de las criptomonedas atraviesa un período de alta volatilidad y aversión al riesgo, afectando principalmente al bitcóin, que ha perdido casi la totalidad de sus ganancias anuales. La principal criptomoneda cayó a un mínimo de seis meses, por debajo de los 96.000 dólares, en un contexto de incertidumbre económica en Estados Unidos. Este desplome se vio agravado por una salida masiva de capital en los fondos cotizados (ETF) de bitcóin en Wall Street, que registraron retiros por cerca de 870 millones de dólares, marcando su segundo peor día en la historia. La confianza de los inversores también se ha visto mermada por su correlación con el índice Nasdaq-100, siguiendo sus pérdidas pero no sus repuntes, y por el llamado «efecto Strategy», donde el valor de una empresa cotiza por debajo de sus tenencias de bitcóin, generando temor. En contraste con la situación del bitcóin, Ethereum (ETH) emerge como un competidor robusto que busca consolidarse más allá de la sombra de su precursor. A diferencia del bitcóin, que se perfila cada vez más como un activo de ahorro, Ethereum se ha transformado en un «motor de utilidad de alta velocidad» gracias a su arquitectura basada en contratos inteligentes. Esta flexibilidad ha impulsado el desarrollo de las finanzas descentralizadas (DeFi), los NFT y otras aplicaciones, posicionándolo como un activo más versátil. Según la estratega de mercados Maria Agustina Patti, Ethereum es más económico y flexible, y funciona como reserva de valor y bien rentable en el espacio digital. La creciente relevancia de Ethereum se refleja en sus métricas: durante el primer trimestre de 2025, su volumen diario de transacciones superó al del bitcóin por cuarto trimestre consecutivo, y en agosto de ese año, el ETH sobrepasó la barrera de los 4.000 dólares. Algunos analistas lo describen como un «oro digital con rendimiento» o incluso lo comparan con el petróleo en el mundo digital por su interoperabilidad y aplicabilidad más allá de las finanzas. Esta percepción se ve reforzada por el hecho de que 69 empresas globales ya acumulan más de 4,1 millones de ETH en sus reservas. Así, mientras el bitcóin enfrenta una crisis de confianza, Ethereum avanza para redefinir el liderazgo en el panorama de los activos digitales.












