Escalada en el Caribe: La 'Operación Lanza del Sur' de EE. UU. eleva la tensión con Venezuela

Estados Unidos ha lanzado la "Operación Lanza del Sur", una ambiciosa ofensiva militar antidrogas en América Latina que ha elevado significativamente las tensiones en el Caribe, especialmente con Venezuela.

El secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, anunció el jueves 13 de noviembre de 2025 el inicio de la "Operación Lanza del Sur", una misión militar ordenada por el presidente Donald Trump con el objetivo de expulsar a los "narcoterroristas" del hemisferio occidental y detener el flujo de drogas hacia su país. La operación está dirigida por el Comando Sur (Southcom) y la Fuerza de Tarea Conjunta Lanza del Sur, y se presenta como una medida para proteger la "patria" estadounidense. El componente más visible de esta ofensiva es el despliegue del portaviones USS Gerald R. Ford y su grupo de ataque hacia el mar Caribe. Este movimiento se suma a una escalada de acciones militares en la región durante los últimos dos meses, que incluyen ataques a embarcaciones en aguas internacionales del Caribe y el Pacífico oriental, los cuales han resultado en más de 70 muertes.

Washington justifica estas acciones letales argumentando que las lanchas transportaban drogas.

Además, se mencionan operaciones encubiertas de la CIA en Venezuela. La operación es ampliamente interpretada como una advertencia al gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela, a quien Estados Unidos acusa de liderar estructuras criminales como el Cartel de los Soles. La tensión ha provocado reacciones diversas en la región: Venezuela anunció una movilización masiva de sus tropas, Colombia condicionó su cooperación al respeto de los derechos humanos y México acordó interceptar embarcaciones sospechosas para evitar incursiones estadounidenses en sus cercanías. Aunque el anuncio es oficial, Hegseth no proporcionó detalles específicos sobre la ejecución de la operación. Fuentes del Pentágono han señalado que el USS Gerald R. Ford aún no ha llegado al Caribe y que su permanencia podría ser breve debido a su valor estratégico y los riesgos de una escalada, considerando la presencia de sistemas antimisiles rusos en Venezuela. La semana pasada, el Senado estadounidense rechazó una propuesta que buscaba bloquear esta escalada militar.