Condena a empleada bancaria por millonario hurto en Antioquia

Una cajera principal fue condenada a siete años de prisión tras confesar el robo de más de 435 millones de pesos de la entidad bancaria donde trabajaba en Sabaneta, Antioquia, en un plan que incluyó la manipulación de cámaras de seguridad.

Jenni Marcela Ortiz Díaz, quien se desempeñaba como cajera principal en una entidad bancaria del municipio de Sabaneta, Antioquia, fue sentenciada a siete años de prisión por el delito de hurto calificado y agravado. La condena se produjo después de que la funcionaria aceptara su responsabilidad en la sustracción de 435.896.654 pesos de la bóveda del banco. El robo fue ejecutado el 12 de diciembre de 2024. Según la investigación de la Fiscalía, Ortiz Díaz planeó meticulosamente el hurto. Primero, alteró el sistema de cámaras de seguridad para no ser grabada.

Luego, para quedarse sola en la sede, engañó a un compañero pidiéndole que saliera a recibir un supuesto domicilio.

Con el camino despejado, solicitó a la central del banco la apertura de la bóveda, tomó el dinero, lo guardó en una tula y huyó. Para despistar, incluso reportó una apertura irregular de la caja fuerte.

A pesar de sus precauciones, las inconsistencias en su reporte y su ausencia laboral desde el día del robo levantaron sospechas. Las autoridades revisaron más de 26 cámaras de seguridad, lo que permitió identificarla como la autora del delito. La captura de Ortiz Díaz se efectuó en enero de 2025 en el barrio Enciso de Medellín. Durante la audiencia de acusación, celebrada el 29 de septiembre de 2025, la exfuncionaria se allanó a los cargos. Aunque su defensa solicitó el beneficio de prisión domiciliaria argumentando una enfermedad grave, la petición fue negada por el juez, ya que el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses no certificó dicha condición. Por lo tanto, deberá cumplir la totalidad de su pena en un centro carcelario.