La doble cara de la IA en Amazon: despidos masivos para impulsar una revolución robótica



El gigante del comercio electrónico Amazon llevará a cabo un significativo recorte de personal, anunciando el despido de 14.000 empleados, una cifra que según diversos medios podría ascender a 30.000 trabajadores de sus oficinas a nivel mundial. Esta reducción representa hasta el 10 % de su fuerza laboral corporativa de 350.000 personas y no afectará a la mayoría de su personal de almacén, que compone el grueso de sus más de 1,5 millones de empleados totales. Los despidos, que continúan una tendencia de recortes que ya sumó 27.000 salidas entre 2022 y 2023, se centrarán en áreas como recursos humanos, publicidad y altos ejecutivos.
La decisión responde a una estrategia impulsada por el director ejecutivo, Andy Jassy, para controlar los costos, corregir la sobrecontratación durante la pandemia de COVID-19 y, fundamentalmente, redirigir las inversiones hacia la inteligencia artificial (IA) generativa. Jassy ha comunicado que, si bien la IA creará nuevos tipos de trabajo, la eficiencia ganada reducirá la necesidad de personal para tareas actuales, lo que llevará a una disminución de la plantilla total en los próximos años. La compañía busca ser "más eficiente y menos burocrática" mientras invierte en lo que considera la tecnología más transformadora desde la aparición de internet. Paralelamente a los despidos, Amazon está acelerando la implementación de nuevas tecnologías para automatizar sus procesos. Proyectos como el sistema robótico Blue Jay ya se encargan de tareas repetitivas en centros logísticos, mientras que la herramienta de IA Project Eluna analiza datos para optimizar la toma de decisiones de los supervisores. La empresa también está desarrollando gafas inteligentes para mejorar la seguridad de los conductores de reparto y utiliza simuladores de realidad virtual para su capacitación.
El objetivo a largo plazo es automatizar hasta el 75 % de las operaciones en algunas instalaciones.
Este movimiento de Amazon se enmarca en una tendencia más amplia dentro del sector tecnológico, donde otras grandes empresas como Meta, Microsoft e Intel también han anunciado recortes de personal para reorientar sus recursos hacia la carrera de la IA. La situación refleja un cambio en el mercado laboral, donde, según análisis citados, los puestos de oficina que involucran lenguaje y toma de decisiones están cada vez más expuestos a la automatización.










