En videos que circularon ampliamente, se observa a funcionarios y habitantes actuando como heridos, con pintura roja simulando sangre, mientras otros evacuan el edificio envuelto en humo artificial.
La dramatización de algunos participantes, que mostraban gestos de dolor y pánico, fue el principal foco de los comentarios humorísticos.
Frases como “Ni Netflix se atrevió a tanto” o “premio Óscar a la mejor película de acción” se popularizaron en plataformas como X e Instagram.
A pesar del tono jocoso de las reacciones, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), entidad convocante del simulacro a nivel nacional, resaltó la importancia de estos ejercicios. El objetivo de la jornada era evaluar la efectividad de los sistemas de alerta, la comunicación entre organismos de socorro y los protocolos de evacuación. Las autoridades locales valoraron la logística del evento, que incluyó la participación de ambulancias y bomberos, y destacaron que, aunque la ejecución generó risas, el ejercicio cumplió su propósito de promover la cultura de prevención y evaluar la capacidad de respuesta del municipio ante una emergencia real.







