Conocido como 'el jeque' por su ascendencia siria, Sabbag combina su carrera como goleador con la producción de música que fusiona ritmos coreanos y latinos. Sabbag, quien también juega para la selección de Siria, ha demostrado una notable capacidad de adaptación cultural al explorar una de las industrias musicales más populares del país asiático.
En 2025, lanzó tres canciones de K-pop, con letras en español y coreano, entre las que destaca su sencillo más reciente, “Seúl”, inspirado en su aprecio por la cultura local. Según declaró el propio deportista, “desde que llegué a Corea me enamoré de su gente, su cultura y su música”. Su incursión en este género no es solo un pasatiempo, ya que cuenta con un estudio propio en su casa y una creciente base de seguidores interesados en su doble faceta. Los artículos destacan su activa presencia en redes sociales, donde muestra su “pinta y flow para sorprender”.
Con 12 goles en 24 partidos en la liga coreana, Sabbag no solo es una figura en el campo de juego, sino que también se está convirtiendo en un fenómeno cultural que rompe esquemas, demostrando que el talento no tiene fronteras y que un futbolista puede ser, al mismo tiempo, una estrella emergente del K-pop.