Sin embargo, esta decisión fue desautorizada por el presidente Petro, quien desde Nueva York exigió en redes sociales que “el Pacto Histórico debe ir a consulta popular. Es el pueblo el que tiene derecho a elegir”.

La presión del mandatario, sumada a un fallo de tutela del Tribunal Superior de Bogotá que habilitó la inscripción de todos los aspirantes, forzó a la coalición a retomar el mecanismo. La controversia central ha sido la participación de Daniel Quintero, exalcalde de Medellín, cuya candidatura genera un fuerte rechazo en el ala más tradicional del petrismo debido a las investigaciones por corrupción que enfrenta.

Esta tensión provocó la renuncia de figuras clave como Gustavo Bolívar, María José Pizarro y Susana Muhamad, quienes declinaron sus aspiraciones para unificar fuerzas en torno al senador Iván Cepeda.

Bolívar fue explícito al afirmar que no podía verse “obligado a trabajar por una candidatura en la que no creo, con muchas incoherencias y sombras”.

Finalmente, el tarjetón de la consulta quedó reducido a tres nombres: Iván Cepeda, Daniel Quintero y la exministra Carolina Corcho, quien se mantuvo firme en su postulación.