Los partidos miembros radicaron una acción de tutela argumentando que el CNE ha superado el plazo legal de 30 días para decidir sobre su solicitud de fusión. La senadora y precandidata María José Pizarro ha sido una de las voces más críticas. Recientemente, el CNE aprobó la creación de su partido, Progresistas, como una escisión del MAIS, pero condicionó la efectividad de su personería a que se resuelvan investigaciones pendientes contra el movimiento indígena. Pizarro calificó la decisión de “agridulce” y anunció que recurrirá a acciones legales, denunciando un trato desigual en comparación con otros partidos que obtuvieron su personería sin dichos condicionamientos. Estas dificultades legales y las disputas internas, como el debate sobre la inclusión de Daniel Quintero en la consulta, ponen en riesgo la cohesión del proyecto político del presidente Petro de cara a las elecciones de 2026.
