La visita a Japón tiene como objetivo principal fortalecer las relaciones bilaterales y comerciales, así como participar en la Exposición Universal de Osaka 2025, donde Colombia cuenta con un pabellón oficial. La agenda del mandatario se enmarca en una estrategia de política exterior que busca diversificar los socios comerciales del país y reducir la dependencia de Estados Unidos, en línea con la reciente adhesión de Colombia a la iniciativa china de la Ruta de la Seda. La designación de Benedetti como presidente encargado se formalizó mediante el decreto 0954, cumpliendo con la exigencia constitucional de delegar las funciones en un miembro del gabinete de la misma colectividad política. La decisión ha sido cuestionada por sectores de la oposición, que recuerdan los escándalos y controversias que han rodeado la carrera de Benedetti. Este viaje se produce en un momento de alta actividad legislativa en Colombia, con el inicio del debate de una nueva reforma tributaria y la discusión del presupuesto nacional para 2026, lo que ha intensificado las críticas sobre las prioridades del Ejecutivo y la frecuencia de sus viajes internacionales en medio de crisis internas.