Las víctimas mortales fueron identificadas como Durley Ascencio Tapiero, Andrés Felipe Arias Ponce y Jaider Miguel Mercado Meléndez.
Los heridos fueron trasladados a centros médicos en Jericó y Chita.
El hecho ha generado una fuerte reacción de las autoridades. El ministro de Defensa, general (r) Pedro Sánchez, anunció una recompensa de hasta 200 millones de pesos por información que conduzca a la captura de los responsables.
"Ni en Boyacá ni en Colombia hay espacio para los criminales", afirmó el ministro, quien se comprometió a fortalecer las capacidades operativas para proteger a la población. Por su parte, el gobernador de Boyacá, Carlos Amaya, rechazó la emboscada y solicitó al Ministerio de Defensa intensificar las operaciones ofensivas en la región. "En equipo con el Gobierno nacional vamos a dejarles claro a estos criminales que Boyacá es tierra de paz y que acá no tienen cabida", declaró Amaya.
La comunidad de Chita, históricamente golpeada por el conflicto, ha expresado su temor ante un posible resurgimiento de la violencia, especialmente por la cercanía con los departamentos de Arauca y Casanare, donde el ELN mantiene una fuerte presencia.