El paro armado fue decretado por el ELN tras una operación de la Fuerza Pública el 20 de julio en Lloró, donde se incautó material de guerra, explosivos y equipos de comunicación, incluyendo drones. La respuesta del grupo armado fue la restricción total de la movilidad en las vías y ríos del departamento, generando un clima de “miedo, dominio y pavor”, según describió monseñor Mario Álvarez, obispo de Istmina, quien además afirmó que “Chocó está hastiado de la violencia”. En respuesta a la acción del ELN, el ministro de Defensa, Pedro Sánchez, calificó el paro como un “constreñimiento criminal” y anunció una recompensa de hasta 20 millones de pesos por información que permita anticipar atentados. Además, se desplegaron más de 3,300 efectivos del Ejército en las principales arterias viales y fluviales. Este es el tercer paro armado que el ELN impone en Chocó en lo que va del año, en medio de una violenta disputa territorial con el Clan del Golfo y con los diálogos de paz con el Gobierno Nacional actualmente suspendidos.
ELN levanta paro armado en Chocó tras paralizar el departamento
El Frente de Guerra Occidental del ELN anunció el levantamiento del paro armado que impuso durante más de 48 horas en el departamento del Chocó, a partir de la medianoche del domingo 27 de julio. La medida de fuerza, que confinó a la población y paralizó la movilidad y el comercio, evidenció nuevamente la capacidad de control territorial de la guerrilla y generó pérdidas económicas estimadas en más de 117 mil millones de pesos.



Artículos
3Política
Ver más
Durante las negociaciones con el Gobierno colombiano (2012-2016), las FARC lanzaron un video de rap que se convirtió en objeto de burla en redes sociales. Esta es la historia detrás de esta canción.

Cuatro exjefes de la Casa del Rey analizan los altibajos de la institución durante el último medio siglo

A pesar de que las mujeres son la mitad de la población del mundo, buena parte de los liderazgos políticos y empresariales están en manos de los hombres

Más de 90 personas quieren ser presidentes de Colombia. Respetémoslos: es una labor dura, solitaria y desagradecida




