Sin embargo, sus métodos han generado controversia.
La 'Lanza del Sur' incluye ataques letales contra embarcaciones sospechosas, que han dejado un saldo de más de 70 muertos en diversas acciones desde septiembre. Un ataque específico en el Pacífico Oriental resultó en la muerte de tres personas identificadas por el Comando Sur como “narcoterroristas”. El gobierno venezolano ha denunciado esta campaña como una agresión ilegal y un pretexto para una intervención. El chavismo afirma que Estados Unidos busca “sembrar un conflicto en la región” y la califica como una “nueva estrategia de dominación”. La operación combina el uso de sistemas robóticos, buques guardacostas y el masivo despliegue naval que incluye al portaaviones USS Gerald R. Ford. Analistas señalan que la narrativa antidrogas sirve para justificar una mayor presencia militar estadounidense, con el objetivo de presionar a Venezuela y contener la influencia de rivales geopolíticos en la región.













