Como reacción directa al despliegue naval estadounidense en el Caribe y las amenazas de operaciones terrestres, el presidente Nicolás Maduro anunció la puesta en marcha del plan ‘Independencia 200’. Este plan contempla la activación de las Zonas Operativas de Defensa Integral (ZODI), especialmente en los estados fronterizos con Colombia como Táchira, Apure y Amazonas, así como en regiones costeras y en la capital, Caracas.
Maduro ha hecho un llamado a la “unión cívico-militar-policial” para la “defensa integral” del territorio, instando a proteger “montañas, costas, escuelas, hospitales, fábricas, mercados y comunidades”.
El ministro de Interior, Diosdado Cabello, reiteró que el país se encuentra en “resistencia activa y prolongada” frente a “la agresión, el asedio y los ataques del imperialismo”.
Además de la movilización militar, Maduro ha llevado su denuncia al plano diplomático, rechazando las “amenazas imperialistas” y afirmando que, aunque su gobierno busca la paz, está preparado para defenderse. En un discurso público, aseguró que el 85% de los venezolanos defendería al país ante una invasión y convocó a la formación de “brigadas milicianas indígenas” para la defensa nacional, advirtiendo: “Si los gringos atacan, responderemos”.












