Esta declaratoria permitiría al régimen suspender derechos y garantías constitucionales para “movilizar a toda la nación”. Paralelamente, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) ha realizado ejercicios militares, como la operación “Caribe Soberano 200” en la isla La Orchila, con la participación de 2.500 efectivos. Además, se ha ordenado el entrenamiento de civiles, incluyendo campesinos y milicianos, en el manejo de armas para la defensa territorial. El ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, afirmó que el país ya se encuentra “en guerra”. Estas medidas han sido acompañadas de movilizaciones oficialistas en Caracas, donde civiles y militares armados han desfilado en apoyo al régimen, y de un llamado a mantener “en alto el fusil y la moral”.