La decisión ha generado una fuerte reacción, especialmente en el sector tecnológico de Silicon Valley.

Empresas como Amazon, Google y Microsoft, que son grandes empleadoras de personal con visas H-1B, han advertido a sus empleados que eviten viajar fuera de EE.

UU. para no arriesgar su estatus migratorio.

Críticos como Elon Musk, exaliado de Trump, calificaron la medida de “absurda”, argumentando que “Estados Unidos se construyó sobre el talento inmigrante”. Para Colombia, se estima que la medida podría afectar a unos 4.000 profesionales, con un posible impacto negativo en las remesas y la transferencia de conocimiento. La medida contrasta con la creación de una “Tarjeta Dorada Trump”, que ofrece residencia a cambio de una inversión de un millón de dólares, lo que ha generado acusaciones de que la política migratoria favorece el capital sobre el talento.