La administración Trump ha fundamentado su ofensiva contra Venezuela en la acusación de que el gobierno de Nicolás Maduro lidera el "Cartel de los Soles", una supuesta organización de "narcoterrorismo". Esta narrativa ha sido la justificación central para el despliegue militar, el aumento de la recompensa por Maduro y la designación de grupos como el Tren de Aragua como objetivos terroristas. Estados Unidos acusa a Maduro y a altos funcionarios de su gobierno de conformar una red criminal que utiliza el territorio venezolano como plataforma para el tráfico de cocaína hacia Norteamérica y Europa. El secretario de Estado, Marco Rubio, ha sido una de las voces más enfáticas, refiriéndose a Maduro como un "narcotraficante" y un "fugitivo de la justicia estadounidense". La fiscal general Pam Bondi también lo señaló como "uno de los mayores narcotraficantes del mundo".
Esta caracterización ha permitido a Washington amparar sus acciones militares bajo leyes antiterroristas, como las surgidas tras el 11-S, que autorizan ataques contra objetivos globales.
Sin embargo, la existencia y estructura del Cartel de los Soles es objeto de debate. El gobierno venezolano, a través de figuras como la vicepresidenta Delcy Rodríguez y Diosdado Cabello, niega categóricamente su existencia, calificando las acusaciones de "inventos del imperio" y una "farsa". Rodríguez llegó a afirmar que Estados Unidos es "el centro mundial de lavado del narcotráfico". Analistas y organizaciones como Transparencia Venezuela señalan que, si bien hay una alta penetración del narcotráfico en las estructuras del Estado, la idea de un cartel jerárquico y unificado como los de Colombia o México podría ser una simplificación de Washington para justificar sus políticas.
En resumenLa narrativa del "Cartel de los Soles" es la piedra angular de la estrategia de EE. UU. contra Venezuela, permitiéndole justificar acciones militares y diplomáticas bajo la bandera de la lucha antiterrorista. Mientras Washington insiste en esta versión, Caracas la niega rotundamente, enmarcando la disputa en un conflicto geopolítico más amplio.