Además, ha prometido la entrega de “fusiles y misiles” a las milicias campesinas y obreras para que defiendan el país.

Esta fuerza civil, creada por Hugo Chávez e integrada a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), está compuesta, según cifras oficiales, por millones de reservistas y voluntarios que reciben entrenamiento militar básico.

La movilización de este cuerpo es una respuesta simbólica y estratégica a la presencia de buques de guerra estadounidenses en el Caribe.

Mientras Washington exhibe tecnología militar avanzada, Caracas apela a la narrativa del “pueblo en armas”.

Figuras del chavismo como el ministro Álex Saab han reforzado este mensaje de unidad, declarando: “Que no se atrevan, porque aquí hay un pueblo unido para defenderse”. Sin embargo, líderes de la oposición como María Corina Machado han calificado la convocatoria como una maniobra desesperada de un “régimen que se está desmoronando” y han llamado a los ciudadanos a desobedecer el reclutamiento.