Néiser Villarreal se consolidó como la gran figura y máximo goleador del Mundial Sub-20 con un triplete histórico ante España, pero una amonestación lo dejará fuera de la crucial semifinal contra Argentina. La suspensión del delantero representa una baja sensible para las aspiraciones de la Selección Colombia en la recta final del torneo. El delantero, quien ya había marcado un doblete contra Sudáfrica en octavos, llegó a cinco goles en el campeonato, igualando al estadounidense Benja Cremaschi pero superándolo por minutos jugados y efectividad, lo que lo posiciona como el principal candidato a la Bota de Oro. Su actuación ante España fue calificada como estelar, siendo el artífice de la remontada y clasificación. Sin embargo, la alegría no fue completa.
Al minuto 76 del encuentro, Villarreal recibió su segunda tarjeta amarilla del torneo “por una niñería”, lo que automáticamente le acarrea una fecha de sanción.
Este “daño colateral muy costoso”, como lo describe un artículo, significa que el técnico César Torres no podrá contar con su jugador más decisivo para el trascendental duelo contra Argentina.
La baja es una preocupación mayúscula, aunque se menciona que su reemplazo natural sería Emilio Aristizábal, otro goleador del plantel. La ausencia de Villarreal es un duro golpe para un equipo que había encontrado en él la contundencia que le faltó en la fase de grupos y que ahora deberá reajustar su ofensiva para el partido más importante del certamen hasta la fecha.
En resumenA pesar de convertirse en el máximo goleador del Mundial Sub-20 con un triplete ante España, la suspensión de Néiser Villarreal para la semifinal contra Argentina por acumulación de tarjetas amarillas es un golpe importante para Colombia, que deberá encontrar un reemplazo para su jugador más decisivo.