Sin embargo, Colombia supo reaccionar.

Yerry Mina empató transitoriamente de cabeza y Luis Javier Suárez igualó el marcador 2-2 justo antes del descanso.

En la segunda mitad, el equipo de Néstor Lorenzo mostró una superioridad ofensiva arrolladora.

Suárez se convirtió en la figura excluyente al anotar tres goles más, mientras que Jhon Córdoba selló la goleada.

Salomón Rondón descontó para los locales.

El técnico Néstor Lorenzo confesó en rueda de prensa su enojo con los jugadores en el entretiempo: “Les pido que no me hagan enojar en el entretiempo otra vez la próxima, porque la verdad sentí que no estábamos compitiendo de la manera en la que hablamos”. Este triunfo marcó un hito para Colombia, ya que fue la primera vez en la historia de las Eliminatorias que anotó seis goles como visitante, una hazaña que no se veía en Sudamérica desde que Brasil goleó a Venezuela en el año 2000. La prensa venezolana lamentó la derrota, calificándola como el fin del “sueño mundialista” y una “noche de pesadilla”.