El capitán no solo fue clave en la clasificación al Mundial 2026, sino que también se coronó como el máximo asistidor del torneo, un logro que avivó el debate sobre su lugar en la historia del fútbol nacional. Con un total de siete asistencias, James superó a todos los demás jugadores del continente, incluyendo a Lionel Messi, y reafirmó su rol como el cerebro del equipo de Néstor Lorenzo. Su visión de juego fue fundamental, especialmente en los últimos partidos, donde aportó dos pases de gol en la victoria 6-3 sobre Venezuela. Además, con su gol ante Bolivia, llegó a 14 tantos en la historia de las clasificatorias, superando a Falcao García como el máximo artillero colombiano en este certamen. Su influencia fue tal que el periodista Iván Mejía afirmó: “No tengo dudas: James es el mejor jugador que haya tenido la selección Colombia en la historia”. Aunque el propio Mejía aclaró que esto no significa que sea el mejor futbolista colombiano en general, su impacto con la camiseta ‘Tricolor’ es innegable. Su actuación le valió ser incluido en el once ideal de las Eliminatorias por parte de la Conmebol y Sofascore.

Tras la clasificación, James expresó su orgullo: “Este grupo siempre tiene hambre, como yo digo siempre.

Intento guiarlos para que puedan ganar”.

Su posible despedida del Metropolitano tras el partido contra Bolivia, donde se le vio emocionado y solitario en el centro del campo, generó especulaciones sobre el fin de su ciclo con la Selección después del Mundial 2026.