En el plano deportivo, Durán ha sido influyente. Se destacó con una asistencia en la victoria 3-1 sobre Kocaelispor en la Superliga de Turquía y fue clave en la clasificación a los playoffs de la Champions League, anotando un gol decisivo ante el Feyenoord.

Sin embargo, su debut liguero estuvo marcado por una acción polémica: recibió una tarjeta amarilla por un codazo que, según analistas, pudo haber sido roja directa.

Este tipo de acciones han encendido las alarmas.

Volkan Demirel, histórico arquero del Fenerbahçe, fue contundente en su análisis: "Con el estilo de José Mourinho, Jhon Durán pronto estará en el banquillo". La advertencia hace eco de la conocida intolerancia del técnico portugués a la indisciplina, recordando casos como el de Mario Balotelli en el Inter de Milán. El historial de Durán, con reportes de problemas de comportamiento en Aston Villa y Al-Nassr, añade peso a estas preocupaciones.

Aunque Mourinho ha elogiado públicamente el sacrificio del colombiano, está claro que su paciencia tendrá un límite.

El reto para Durán será canalizar su intensidad de manera positiva para consolidarse en un equipo de alta exigencia.