Tras superar una molestia muscular que lo mantuvo ausente en dos partidos, regresó a los entrenamientos, pero su titularidad no está garantizada.
A esta falta de ritmo se suma la incertidumbre sobre su futuro, ya que su contrato vence en diciembre de 2025 y, según varios reportes, la directiva no tendría intención de renovarlo.
El propio jugador expresó su situación: "Hasta ahora no han dicho nada...
Si no tienen la idea de poder seguir, pues tomaré otro camino".
Por su parte, Juan Fernando Quintero también generó preocupación tras ser sustituido en un partido con River Plate por una molestia en su rodilla izquierda.
Aunque los informes iniciales sugieren que no es una lesión grave, su estado será monitoreado de cerca.
Estas dudas sobre dos de los principales creativos del equipo representan un desafío para Lorenzo, quien deberá evaluar si ambos jugadores llegarán en condiciones óptimas para los duelos cruciales contra Bolivia y Venezuela, donde se definirá la clasificación al Mundial.