La ejecución del penal, convertida en gol, le otorgó los tres puntos al equipo local. La reacción del club 'heroico' no se hizo esperar y, a través de sus redes sociales, publicaron un controvertido mensaje calificando al árbitro como "la figura del partido", en una clara muestra de ironía y descontento. La polémica escaló rápidamente, y los directivos de Real Cartagena se reunieron con miembros de la Comisión Arbitral para expresar su malestar y exigir que se tomen medidas correctivas. Como resultado, se ha informado que la Dimayor investigará el incidente, lo que podría acarrear sanciones para el colegiado. Este episodio ha vuelto a poner sobre la mesa el debate sobre la calidad del arbitraje en el fútbol de ascenso colombiano y la necesidad de garantizar la transparencia en la competición.