El conflicto se hizo público cuando Espinosa propuso aplazar la encuesta interna, programada para realizarse entre el 15 de noviembre y el 1 de diciembre, hasta el 30 de enero de 2026.

Su argumento es que los precandidatos, que también incluyen a Aníbal Gaviria y Juan Carlos Cárdenas, aún no tienen suficiente reconocimiento a nivel nacional y necesitan más tiempo para posicionar su mensaje.

"No hemos hecho lo suficiente", afirmó en una carta.

Por su parte, Juan Guillermo Zuluaga rechazó categóricamente la propuesta, insistiendo en que se deben respetar los acuerdos pactados para mantener la confianza dentro del grupo.

"A enero no podemos llegar todavía con cuatro precandidatos", sostuvo, subrayando que "las fechas hacen parte del acuerdo y son inamovibles".

El cambio de fecha afectaría drásticamente la estrategia de la coalición, que se basa en la recolección de firmas, cuyo plazo vence el 17 de diciembre. La idea original era que el ganador de la encuesta consolidara las firmas de todos los aspirantes, un plan que ahora está en el aire. Esta fractura debilita a la coalición y pone en duda su capacidad para competir en la consulta interpartidista de marzo.