El senador Iván Cepeda se consolidó como el candidato presidencial del Pacto Histórico para las elecciones de 2026, tras obtener una contundente victoria en la consulta interna del 26 de octubre con más de 1,5 millones de votos. Su triunfo, que duplicó la votación de su principal contendora, la exministra Carolina Corcho, fue celebrado por el presidente Gustavo Petro y marca el punto de partida para la construcción de un “Frente Amplio” que aglutine a diversas fuerzas progresistas. Tras su victoria, Cepeda afirmó que su campaña se centrará en propuestas y no en ataques personales, y que buscará un “acuerdo nacional” a través del diálogo. “Soy partidario de buscar un diálogo, pero no se trata de una conversación eterna y sin propósito”, declaró, al tiempo que condicionó su participación en debates a la existencia de reglas claras.
El resultado fue interpretado por el oficialismo como una demostración de fuerza y unidad. El presidente Petro celebró la participación de casi tres millones de ciudadanos y propuso que el Frente Amplio, al que sugirió llamar “Frente Humano”, incluya al Partido Verde, la “nueva U” y el liberalismo de inspiración gaitanista. La victoria de Cepeda, una figura histórica de la izquierda y defensor de los derechos humanos, reordena el panorama del progresismo, dejando atrás a figuras como Roy Barreras y Daniel Quintero, quienes no lograron consolidar sus aspiraciones dentro de la coalición.
La oposición, por su parte, reaccionó con críticas, calificando a Cepeda como un “peligro para Colombia” y un candidato radical.
En resumenLa victoria de Iván Cepeda en la consulta del Pacto Histórico lo posiciona como el candidato oficial de la izquierda, con un mandato claro para liderar la construcción de una coalición más amplia de cara a 2026. Su enfoque en el diálogo y las propuestas, junto con el respaldo del presidente Petro, definirá la estrategia del progresismo para mantener el poder, en un escenario político que sigue marcado por la polarización.