Su triunfo fue reconocido por el presidente Petro, quien afirmó: “Se impone la democracia y hay que obedecerla.
El pueblo ha elegido libre”.
La victoria consolida a Cepeda, filósofo de 63 años y reconocido defensor de los derechos humanos, como el heredero político del proyecto petrista. Su trayectoria como negociador de paz con las FARC y el ELN, y su rol en el proceso judicial contra el expresidente Álvaro Uribe, han definido su perfil como una de las figuras más representativas de la izquierda tradicional. Tras su victoria, Cepeda hizo un llamado a un debate de altura, retando a sus futuros contendores a enfocarse en propuestas y no en descalificaciones personales: “No iré a debates a insultarme con otros precandidatos, ni a amenazarse, ni a denigrarse”. Ahora, el camino de Cepeda se dirige a una posible consulta interpartidista del denominado Frente Amplio en marzo de 2026, donde buscará unificar a un espectro más amplio de la centroizquierda, aunque persisten dudas jurídicas sobre si el formato de la consulta del Pacto le permitirá participar en esta segunda instancia. Su elección marca el inicio de una campaña en la que buscará dar continuidad a las reformas del actual gobierno, con la paz y la justicia social como banderas principales.











