“Estoy muy angustiado, mi padre estuvo secuestrado 8 años y esto me revuelve sentimientos que ya había dejado en el pasado”, expresó el precandidato, quien criticó la falta de respuesta inicial por parte del Gobierno.
“Nadie me contesta, ningún ministro, ni del Interior ni de Defensa.
Estamos jodidos”, afirmó en una entrevista.
Tras la denuncia pública, el ministro del Interior, Armando Benedetti, informó que la Policía Nacional ya había recibido la denuncia y que se dio instrucción a la DIJIN para adelantar las investigaciones. Asimismo, se ordenó a la Dirección de Protección de la Policía (Dipro) y a la Unidad Nacional de Protección (UNP) coordinar la valoración del esquema de seguridad de Lizcano y su familia. Este incidente se suma a un ambiente de preocupación por la violencia política, exacerbado por el reciente asesinato del también precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, y pone de relieve los riesgos que enfrentan los aspirantes en la contienda hacia 2026.












