La Registraduría Nacional del Estado Civil ratificó la realización de la consulta del Pacto Histórico para el 26 de octubre, en la que se definirá su candidato presidencial entre Iván Cepeda, Carolina Corcho y Daniel Quintero. Esta confirmación se produce en medio de una fuerte tormenta jurídica y política, luego de que el Tribunal Superior de Bogotá declarara improcedente una tutela que había permitido la inscripción de los precandidatos, dejando el proceso sin piso legal. La controversia inició cuando el Consejo Nacional Electoral (CNE) aprobó la fusión del Pacto Histórico como partido único, pero condicionó su personería jurídica a la resolución de procesos sancionatorios contra algunos de sus partidos miembros, excluyendo temporalmente a Colombia Humana.
Para sortear este obstáculo, Corcho y Gustavo Bolívar interpusieron una tutela, logrando una medida cautelar que permitió las inscripciones.
Sin embargo, el fallo de fondo del Tribunal revocó dicha medida, argumentando que el CNE actuó dentro de la ley. El presidente Gustavo Petro reaccionó enérgicamente, calificando la decisión como un “golpe político contra la democracia premeditado” y un “sabotaje” para impedir la participación de su coalición. Tras una reunión de urgencia en la Casa de Nariño, los tres precandidatos firmaron un acuerdo para mantener la consulta, denunciando un intento de la derecha por dividirlos. La Registraduría, por su parte, argumenta que el proceso sigue adelante porque la solicitud fue hecha por partidos con personería jurídica vigente (Polo Democrático, Unión Patriótica y Partido Comunista), configurándose como una consulta interpartidista, no interna. El registrador Hernán Penagos desmintió haber conversado con Daniel Quintero para darle garantías, como este había afirmado, y subrayó que la decisión se basa en análisis técnicos.
El costo de la consulta asciende a 193.517 millones de pesos.
En resumenA pesar de un fallo judicial adverso que dejó sin sustento legal su mecanismo de consulta interna, la Registraduría confirmó la votación del Pacto Histórico para el 26 de octubre, reconfigurándola como interpartidista. La decisión desató un choque entre el presidente Petro, quien denunció un “golpe a la democracia”, y el poder judicial, mientras los precandidatos cerraron filas para continuar con el proceso.