Mientras precandidatos como Bolívar y Muhamad han cuestionado su inclusión debido a las investigaciones por corrupción que enfrenta, el presidente Gustavo Petro ha pedido a su bancada “no vetar” su aspiración.
Estas diferencias se suman a las disputas generadas por la reciente elección del magistrado Carlos Camargo en la Corte Constitucional. Gustavo Bolívar acusó a senadores del propio Pacto de “voltearse” y no apoyar a la candidata del gobierno, lo que provocó una airada respuesta de la senadora Gloria Flórez, quien le exigió pruebas y advirtió que estas divisiones “le están entregando a la ultraderecha en bandeja de plata al pueblo colombiano”. Cada precandidato, además, está impulsando sus propias redes de aspirantes al Congreso, lo que evidencia la existencia de facciones y una competencia interna que podría fragmentar el voto en la consulta y dificultar la consolidación de listas unificadas para el legislativo. La senadora Aída Avella también confirmó su aspiración a un último periodo en el Senado, sumándose a la reñida contienda interna.