Esta personería es fundamental para que Progresistas pueda fusionarse con los demás partidos del Pacto.

Mientras tanto, la solicitud de fusión general de la coalición, radicada hace más de dos meses, sigue sin respuesta del CNE, lo que llevó a los representantes legales de los partidos miembros a instaurar una acción de tutela ante el Tribunal de Bogotá por la vulneración de sus derechos. El representante Gabriel Becerra advirtió que el silencio del CNE es “un ataque a la voz de millones de colombianos”. La falta de una decisión clara del CNE mantiene en vilo la estrategia electoral de la izquierda, que busca competir con una lista única y cerrada al Congreso para maximizar su representación.