Esta acción legal evidencia una nueva ruptura entre la casa Gaviria y los hermanos Galán, complicando posibles alianzas futuras. La demanda, impulsada por el partido que lidera el expresidente César Gaviria, argumenta que la similitud en los emblemas podría generar confusión entre los electores. El recurso legal sostiene que el uso de la palabra "Liberalismo" y los colores rojo y blanco por parte del Nuevo Liberalismo afecta los derechos políticos del Partido Liberal, ya que, según la demanda, "el origen de ese partido surgió de vertientes políticas existentes en el interior del Partido Liberal, por lo que guardan semejanza y no se logra identificar con claridad la diferencia". Juan Manuel Galán, director del Nuevo Liberalismo, calificó la acción como una forma de "revictimización" y declaró: "Ahora nos quieren negar el derecho fundamental a participar en política luego de una lucha de años para reabrir ese espacio.

Es algo que no se puede entender".

Este enfrentamiento judicial dificulta una posible adhesión de Galán a la coalición de oposición convocada por Gaviria y Álvaro Uribe, exponiendo las profundas divisiones que persisten en los sectores no afines al gobierno de cara a las elecciones de 2026.