Las fuerzas de izquierda y centro-izquierda planean realizar una consulta interpartidista en marzo de 2026, coincidiendo con las elecciones legislativas, para definir un candidato presidencial único bajo la sombrilla de un “Frente Amplio”. Esta estrategia busca unificar al sector progresista para competir con mayores posibilidades en la primera vuelta presidencial del 31 de mayo de ese año. El presidente Gustavo Petro ha respaldado la iniciativa, proponiendo llamarla “Frente Humano” e invitando a figuras del Partido Verde, la Nueva U y el “liberalismo de Gaitán y López Pumarejo”. Tras ganar la consulta del Pacto Histórico, el senador Iván Cepeda se perfila como el candidato de esta coalición para competir en el Frente Amplio.
Sin embargo, su participación enfrenta incertidumbre jurídica, ya que algunas interpretaciones legales sugieren que no podría competir en una segunda consulta.
A pesar de ello, Cepeda ha invitado a “fuerzas políticas afines” a unirse para ganar la presidencia en primera vuelta.
Otros aspirantes que podrían participar son el exsenador Roy Barreras y el exministro Juan Fernando Cristo, quien en una carta a los precandidatos advirtió que la coalición “no puede ser una simple coalición coyuntural o mecánica para escoger un candidato presidencial”, sino un proyecto de país. La participación del exalcalde Daniel Quintero también es una posibilidad, aunque depende de que resuelva sus propios líos jurídicos tras haberse retirado de la consulta de octubre.
En resumenLa consulta del Frente Amplio en marzo de 2026 es el próximo paso estratégico para que la izquierda y el centro-izquierda definan una candidatura presidencial unificada. El éxito de esta coalición dependerá de su capacidad para superar las divisiones internas y las incertidumbres jurídicas, y de articular un proyecto político que vaya más allá de la elección de un solo candidato.