La ponencia ha generado una fuerte reacción del Gobierno.

El ministro del Interior, Armando Benedetti, calificó la actuación de Ibáñez como un "golpe de Estado" y lo acusó de actuar como "líder de la oposición". Benedetti contrastó la postura del magistrado con el concepto favorable de la Procuraduría, que validó el trámite legislativo. La decisión final dependerá de la votación en la Sala Plena de la Corte, donde Ibáñez necesitará el apoyo de una mayoría de magistrados para que su ponencia sea aprobada.