Sin embargo, el proceso ha estado marcado por la controversia.

Tres diputados —Luis Manuel Rojas, Gabriel Calle Aguas y Juan Antonio Flórez— decidieron apartarse de la etapa final, denunciando presuntas irregularidades en la selección de los finalistas. Esta postura ha avivado las críticas sobre la posible influencia de intereses políticos en la designación de un cargo técnico y de control fundamental para la administración departamental. La elección del 20 de octubre será, por tanto, un momento clave no solo para definir al nuevo contralor, sino también para medir la confianza en las instituciones locales y su capacidad para garantizar procesos transparentes y meritocráticos.