Según el gobernador del Atlántico, Eduardo Verano, la RAP Caribe ha funcionado durante cinco años y ha cumplido con todos los requisitos para dar este paso.

La nueva estructura incluiría una junta de gobernadores y un consejo administrativo, y sus competencias abarcarían desde infraestructura y regalías hasta salud y educación. De ser aprobado el proyecto en el Congreso antes de noviembre, se buscará la ratificación ciudadana a través de un referendo que se realizaría el 8 de marzo de 2026, coincidiendo con las elecciones legislativas. Benedetti explicó que este es el “último paso” para que el Caribe sea un ente territorial, en una apuesta por combatir el centralismo y fortalecer la autonomía regional. La iniciativa es vista como un modelo para otras RAP del país que también aspiran a consolidar su autonomía.